La lectura “Supply Chain Re-thinking” propuesta para la clase de
Pensamiento Sistémico trata de la necesidad de cambiar la cadena de suministro
tal como se ha planteado durante mucho tiempo. En la actualidad es muy difícil
mantener un pensamiento lineal de la cadena de suministro, puesto que la
realidad está compuesta de varias variables que en cualquier momento afectan a
los paradigmas establecidos con respecto a ella.
Los autores realizaron una
analogía muy adecuada acerca de las compañías que conforman la industria, que
ayuda a comprender de forma práctica los cambios que necesitan para integrar la
“optimización” de la producción de bienes y servicios con la satisfacción del
cliente. Dicha analogía muestra dos tipos de enfoque de las organizaciones: un
enfoque creativo en comparación con el hemisferio derecho del cerebro y un
enfoque racional en comparación con el hemisferio izquierdo.
El
eje central del cuerpo humano es el cerebro, y esto se debe a la incorporación
de sus hemisferios tan distintos, pero tan complementarios. El hemisferio
derecho incentiva a la creatividad en su máxima expresión, busca el colorido de
las cosas y proporciona una perspectiva que mezcla la realidad con la
imaginación. El hemisferio izquierdo se encarga de ver el mundo
algorítmicamente y analiza el entorno lo más racional y lógico posibles.
Por un lado, las empresas
que poseen un enfoque creativo no tienen un control definido de la
administración de la cadena de suministro; más bien, recorren un camino sujeto
a la subjetividad y a la improvisación. El desarrollo de estas organizaciones
depende del riesgo que asumen debido al constante devenir. Por otro lado, las
empresas que poseen un enfoque racional tienden a ser rígidas en la manera en
que administran la cadena de suministro; o sea que tienen un pensamiento
lineal. Se puede decir que estas organizaciones tienen miedo de salir de la
zona de confort en la que se encuentran.
La cadena de suministro
tiene como objetivo principal satisfacer las expectativas del cliente, e
incluso llegar a superarlas. Para cumplir con tal objetivo, esta cadena debe
verse sistémicamente, porque hay un sin número de relaciones que la mantienen
en funcionamiento, y cualquier percance es capaz de quebrantarla. Por eso, en
el ámbito empresarial no hay leyes que dicten cómo se deben realizar las
acciones para que todo vaya de viento en popa.
La cadena de suministro es
de vital importancia en la Ingeniería Industrial, porque de ella depende el
éxito del propósito empresarial. Los diferentes cambios han afectado la manera
en que se ha manejado la cadena de suministro, lo cual saca a relucir las
debilidades de la empresa y aviva la competencia. Esto conlleva al
replanteamiento de la administración de la cadena de suministro en un futuro a
corto plazo.
La administración de la
cadena de suministro debe tener como base la integración de una parte creativa
con una racional, de manera que pueda configurarse un entorno empresarial que
mantenga un control de las variables que la afectan sin encerrarse dentro de
una “burbuja” que no permita ver otros métodos, técnicas y propuestas que sean
mucho más efectivos para su buen desempeño.
Como ya se ha dicho, hay
dos tipos de enfoques organizacionales: el creativo y el racional, estos marcan
drásticamente la forma en que las empresas toman sus decisiones. Las empresas
creativas toman sus decisiones con base a una perspectiva futurista, y las
empresas racionales sólo conciben el pasado y el presente para tomar las
decisiones.
Así como el cerebro
depende de dos hemisferios, las compañías dependen de dos enfoques sistémicos.
No se puede pretender cumplir con la buena administración de materia prima,
recursos humanos, transportes y distribuciones, almacenamientos, satisfacción
al cliente, etc., si no se ha discernido apropiadamente las relaciones del
sistema que es la cadena de suministro.
El restablecimiento de la
administración de la cadena de suministro debe estar fundamentado en dos partes
análogas a los hemisferios que componen un cerebro. No hay mejor integración de
dos partes para una organización que tenga en cuenta al pasado y no cometer los
mismos errores, el presente para seguir con lo bueno del pasado y mejorarlo y
al futuro para visualizar un punto de llegada que satisfaga los objetivos
organizacionales y las expectativas del cliente.
La postura de la
organización del futuro a corto plazo debe estar fijada en el holismo que busca
dejar atrás el conocimiento excesivo del contenido de las partes de un sistema
y entender las relaciones de las partes de un sistema que son las que realmente
permiten que haya un intercambio de información para un fin específico.
No hay pautas que seguir,
el sistema de la cadena de suministro es muy complejo, y lo único que se puede
hacer es tratar de llegar a lo más profundo de sí (como un “zoom-in”) y salir hasta su
entorno más externo (como un “zoom-out”),
y analizar cómo interactúan los componentes en cuanto a lo procedimental y a lo
espontáneo.